Janna es una mujer en la incipiente cincuentena. Trabaja en una revista de moda de gran tirada. Vive en una situación económica desahogada. Ha perdido a su marido primero y a su madre después, en dolorosas enfermedades. Ha sido incapaz de manifestar sus sentimientos abiertamente en la cercanía de ellos, escudándose en una aparente frialdad. Un día conocerá por casualidad a la anciana Maudie y su vida tomará un rumbo totalmente diferente.
Embed from Getty ImagesLa protagonista alberga sentimientos de culpa por no haber sabido atender y comprender en los últimos momentos de vida, tanto a su marido como a su madre. La amistad que entabla con Maudie, producirá una conmoción profunda en sus convicciones. El término “buena vecina”, alude a personas que ayudan a otras personas necesitadas en la vejez, haciendo compras, limpiando, cocinando… Pero Janna no cree ser “buena vecina” con la anciana; considera amistad su relación con Maudie, que ha enriquecido su vida, dotándola de sentido.
Janna escribe un diario en el que refleja su vida laboral, sus encuentros con la anciana, sus propios momentos de soledad en el hogar, sentimientos, anhelos. Se plantea la escritura de novelas de entretenimiento para personas de edad y más importante aún son varios ensayos en torno a la problemática de las personas ancianas, en el que reflejará gran parte de la vida de Maudie.
Maudie no quiere abandonar su casa. A pesar de vivir en una situación precaria en una vivienda húmeda y fría, se aferra a su hogar como preciado tesoro. Las conversaciones que mantiene con Janna, nos dejan entrever un pasado de penalidades, tanto en el hogar de los padres, con un padre autoritario y vejatorio con su madre; como en su propia vida, con un matrimonio fracasado, con un marido egoísta, del que únicamente salva el fruto de ambos: su hijo. Para poder sobrevivir con su hijo a cuestas ejercerá oficios diversos, sintiéndose más cómoda en una sombrerería.
Doris, acerca un tema que parece tabú en nuestras sociedades modernas de ritmos acelerados: la vejez. Las necesidades de las personas de edad avanzada, de atención, de entendimiento, de cariño.
Aborda la problemática de los momentos de decaimiento físico y/o psíquico de las personas ancianas que las abocan a tener que ser atendidas en un Hospital, donde cabe esperar el deterioro final y la muerte. La autora nos habla de la necesidad de un entorno lo más humanitario y familiar posible en los últimos momentos de vida. Refleja Lessing, cómo el contacto con una persona de edad avanzada puede enriquecer la vida de personas receptivas.
Plantea profundas cuestiones vitales con una prosa fluida de aparente sencillez, pero incisiva en el fondo; promoviendo la reflexión.
Como fondo musical para la lectura de esta imprescindible obra; una audición de un indispensable disco de este mismo año: “Sextet”; del compositor, saxofonista y clarinetista neoyorquino, Ken Thomson; que integra de manera inteligente, el jazz moderno con la música clásica contemporánea.
Components:
Adam Armstrong, bass; Alan Ferber, trombone; Ken Thomson, alto saxophone, compositions; Anna Webber, tenor saxophone; Russ Johnson, trumpet; Daniel Dor, drums