Lp contundente de sonidos sixties garageros, de la banda de Nueva York, The Electric Mess; donde destaca la presencia de Esther Crow, una líder carismática con una voz que se adapta como un guante al estilo. Bien secundada por una banda compacta que parece conocerse bien.
El álbum mantiene un nivel muy alto en casi todo el disco, debido a la intensidad que Esther, como indico, imprime en las canciones.
Un disco que va transcurriendo sin apenas conceder tregua. Quizás se eche en falta alguna canción de medio tiempo más, para relajar un poco el tempo, claro que esto es un poco apreciación personal; que no afecta en mayor medida a un disco muy disfrutable para quienes gustamos de los sonidos que tienen la mirada puesta en la edad dorada del garage.
